El amigo

Pepe -   ¡Qué mala suerte! Fíjate que yo quería hacer un viaje a París y resulta que no me llega el dinero.

Amigo - Normal ¿es que te crees que es barato un viaje esos o qué?

Pepe-    No, no si yo disponía de 40.000 ptas. pero el viaje...

Amigo - ¡Solucionado!

Pepe -   ¿Solucionado? ¿El qué está solucionado? Yo te hablaba del viaje... 

Amigo - Que el viaje por 40.000 pelas te lo consigo yo...

Pepe -   Ya, ya, pero es que el viaje... ¿Qué has dicho? ¿Tú?

Amigo - ¡Claro hombre! Si yo te lo consigo, pero rápido eso.

Pepe -   ¿No me digas? 

Amigo - Claro, ¿para qué están los amigos?

Pepe -    Para chuparte la sangre. 

Amigo - Ya, ya, pero además están para ayudarte en los momentos claves como el tuyo ahora.

Pepe -    Es que... A mí me han dicho que tú eres un vivales.

Amigo - Por eso, por eso te voy a conseguir el viaje, que yo conozco a mucha gente.

Pepe -    Pero ¿Viaje por avión? 

Amigo - ¡Hombre, no va a ser en triciclo!

Pepe-    Y ¿Hotel también? 

Amigo - Claro, y pensión completa, baño completo, etc etc, etc,...

Pepe -    ¡Jo, macho! Pero ¿seguro que no es un timo para quedarte con mi dinero?

Amigo - ¿Por quién me tomas?

Pepe -    Es que las malas lenguas dicen...

Amigo - También las malas lenguas dicen que tú eres tonto y yo te estoy tratando como a un amigo.

Pepe -   Gra-gracias.

Amigo - Pero volvamos al negocio, entonces tú me das las 40.000 pelas y yo te consigo el viaje.

Pepe -   Es-espera... déjame pensarlo.

Amigo - Si no tienes que pensar nada, si está claro.

Pepe -   Ya, ya, pero es que darte así el dinero, sin garantías...

Amigo - ¿Cómo que sin garantías? Yo soy tu amigo ¿no?

Pepe -   Esto, creo que sí...

Amigo - Pues entonces tú me las das a mí y yo te doy el pasaje pasado mañana.

Pepe -   Pero ¿seguro que me consigues el avión y el hotel con pensión completa en París por 40.000 ptas.?

Amigo - ¿No te he dicho que yo tengo relaciones?

Pepe -   ¡Jopé, macho! Y ¿por qué no me das tu su dirección y hago yo directamente lo del pasaje?

Amigo - Porque tienes cara tonto y al final te engañarían, en cambio a mi no me timarán porque los conozco.

Pepe -   Y tú ¿no me vas a timar?

Amigo - Por favor, no me ofendas, yo por un amigo soy capaz de partirme un brazo.

Pepe -   No, si tú eres un amigo.

Amigo - Entonces suelta la mosca y te soluciono el viaje en 2 días.

Pepe -   Bueno, bueno... toma, pero házmelo bien ¿eh?

Amigo - No te preocupes, usaré este dinero cómo si fuera mío.

Pepe -   Vale, entonces hasta dentro de 2 días. ¡Adiós!

Amigo - ¡Adiós!... A ver si te pierdes, ¡Jó con el tonto! 40.000 pelas, vamos a ver, 4.000 para la cena, 5.000 para alquilar un coche, 20.000 para sacar a la Luci, jobar me voy a pasar 2 días divinos a costa del tonto.